El cartel de la autopista del Norte: esto es engagement y el resto una tontería

cartel autopista del norteEngagement es uno de los términos más usados últimamente en marketing, y sobre todo en la gestión de comunidades online. Traducido literalmente al castellano significa «compromiso», aunque su significado real vaya mucho más allá y realmente signifique algo así como «lograr el amor incondicional o fuerte vínculo de una persona hacia una marca».

Una de las plataformas o medio social en donde es relativamente fácil medir el engagement, es fuera de toda duda, Facebook. Las estadísticas internas de este medio nos permiten analizar algunos KPI (key performance indicators) que pueden darnos una idea bastante aproximada del grado de compromiso y vinculación que tienen los fans con la marca que gestionamos. Con los últimos cambios en Facebook Insights y  la aparición de la métrica «personas están hablando de esto», todavía se hace más fácil esa medición (en esta infografía publicada por Pizcos podemos ver más datos).

Son muchos los consejos que se dan por parte de manuales y expertos en la materia acerca de cómo conseguir un mayor engagement en nuestra fan page de Facebook (número de publicaciones diarias, tipo de contenido, responder a los comentarios de los participantes, etc.), aunque no hay una norma fija y algunas comunidades «rompen» completamente esas normas, como por ejemplo  el caso de Zara, del que mucho se ha hablado ya en varios posts, como en el recientemente publicado por @manorodriguez.

Y es aquí donde me gustaría presentar un caso, que cuanto menos, me parece curioso. Desde hace varios años, una persona que se hace llamar «anoniman», pone frases en un cartel situado en la autopista del norte de Tenerife, a la altura del kilómetro 32, muy cerca del Puerto de la Cruz. La inmensa mayoría de conductores que transitan esa carretera a diario ven como casi a diario hay una nueva frase en ese cartel. Se trata de frases agudas, ingeniosas y perspicaces que muy bien podrían pertenecer a un tweet ( por cierto, hay cuenta de Twitter y se llama @cartelautopista).

Anoniman tiene un blog en cual se van colgando fotos de las frases colocadas en el cartel. Ni más, ni menos. No hay texto, no se responden comentarios, pero esta bitácora tiene 1214 personas agregadas en la red Google Friend Connect, lo que ya nos da una idea de cómo el cartel se ha convertido en social object.

Pero más llamativa aún es la fan page en Facebook. Son ya más de 23.000 fans, y aquí no tenemos landing page, ni bonitas pestañas personalizadas, ni siquiera username personalizado ni nada por el estilo. Solamente mirando algunos números podemos quedarnos boquiabiertos: 2561 personas hablando de esto y un extenso número de personas a las que les gustan las publicaciones, las comentan y las comparten. Como pueden imaginar, y de manera similar al blog, no hay moderación de comentarios ni otro contenido diferente al de la foto que corresponde a cada nueva frase. No entro a hacer ahora cálculos específicos para hallar el engagement rate, pero ya le gustaría a más de una marca tener estos números.

¿Por qué ha tenido tanto éxito esta iniciativa? Porque, en primer lugar, el autor del cartel no ha tenido más intención que la de aportar algo original, lleno de ingenio y con la única premisa de poner mensaje, tal y como dice «anoniman» que «inviten a sonreir, a soñar, ideas que te colocan en lado positivo». En segundo lugar, no hay ningún tipo de manipulación, intento de viralización ni ánimo de lucro: lo hace por el mero hecho hacerlo, y por le placer que ello le da. Y en tercer lugar, porque antes de que existiera la fan page, e incluso el blog, ya se había creado ese objeto social necesario que requieren los productos o servicios que se anuncian en la red. Los usuarios de la autopista, y en general, los habitantes de la isla ya hablábamos de el fenómeno del cartel antes de que las redes sociales se convirtieran en propagadores y difusore de información y contenidos a gran escala.

Sin duda, este es el ejemplo de una comunidad » de verdad» y de engagement. Lo demás son tonterías 🙂

Edit: justo al publicar el post he visto otro de @xpeytibi que también habla de los carteles de la autopista del norte, aunque en este caso se centra en una polémica surgida por la manipulación de una de las fotos por parte de un partido político. Les sugiero revisarlo por los datos que aporta, creo que ambos posts son complemnetarios. (Visto gracias a @jfrechin)

¿Por qué nos empeñamos en que Twitter sea algo que NO es?

TwitterEsta semana he empezado a colaborar con los compañeros de Las Iniciativas, en donde iré publicando posts mensualmente. Por aquí dejo el primero 😀

Uno de los debates más activos y recurrentes sobre Twitter es acerca de cúantas personas seguir y cómo gestionarlas, o si debemos seguir a todo aquél que nos sigue.  Habitualmente se critica mucho a los denominados “gurús” por no seguir apenas a nadie, mientras a ellos les siguen miles o cientos de miles de personas.

He de reconocer que estoy un poco cansado del debate. He leído en innumerables posts cómo se supone que debe ser la ratio entre seguidores y seguidos en Twitter (en alguna ocasión se atreven a dar cifran concretas). También leo con cierta frecuencia posts en donde se atribuyen rasgos psicológicos a las personas muy seguidas y que siguen a poca gente (esa persona “no escucha”, “es egocéntrica”, etc…)

En mi opinión, hay un fallo de base en este tipo de argumentaciones. Twitter es un red asimétrica, podemos seguir a quien nos plazca sin la necesidad de que ellos nos sigan a nosotros, y creo que es una de las características que han hecho que la red de microblogging haya tenido tanto éxito. Si Twitter  es asimétrico (y Google+ y Facebook también nos ofrecen esa posibilidad con las suscripciones y los círculos) ¿por qué debemos establecer un patrón de seguimiento o seguir a todo el que nos sigue?

Parece que, de algún modo, muchos quisieran que Twitter funcionara como una red simétrica, en donde todos los perfiles se sigan unos a los otros. O sea, que desearían que Twitter fuera algo que no es.

Que cada uno use Twitter como quiera. Seguir a más o a menos personas, o corresponder a todos nuestros “follows” no nos convierte en mejores personas. Además ¿te has planteado cómo gestionarías una cuenta si te siguieran más de 50.000 personas? Y si siguieras a todos los que te siguen ¿serías capaz de leerlos a todos?

No seguir a alguien no significa no escucharle, aunque, por otro lado, no estamos “obligados” a escuchar a todo el mundo. En todo caso, el uso de listas y replies nos permiten interactuar con quien nos plazca en cada momento, y como ya decía antes, la asimetría como una de las principales características de Twitter engrandece a esta red.

¿Cómo gestionas tus follow y following en Twitter? ¿Sigues a todo aquél que te sigue? ¿Crees que debe haber un porcentaje mínimo de gente a la que seguir?

Imagen obtenida de www.cuentatwitter.com

¿Qué es para mí la fe?

Escribo hoy unas pocas líneas sobre la fe, a iniciativa de Ángel Cabrera, que ha extendido su propuesta por toda la blogosfera. No se muy bien qué es la fe. Seguramente la he asociado siempre con la religión, con la creencia en un ser divino, con asumir ciertos postulados y dogmas.

Pero buscando un poco más dentro de mí, adivino que la fe es creer en algo o en alguien, más allá de mi agnosticismo u opiniones sobre credos, comunidades eclesiásticas o devociones varias.

Fe es tener esperanza para que tu proyecto salga adelante. Fe es saber atajar las dificultades en momentos difíciles. Fe significa estar seguro de que estás yendo por el camino correcto, aunque te caigas varias veces y te hagas daño.

Fe es creer en uno mismo. Fe es tener objetivos y metas, y querer llegar a ellas. Fe es seguir adelante a pesar de que a veces quieran frenarte. Fe es tener fe en otro. Fe es también creer en otros, en los que te hacen crecer y lloran y ríen contigo.

Fe es querer nacer de nuevo cada día. Fe es tener ilusión, ganas y energía.

Y para acabar, una canción de George Michael que me estremeció desde la primera vez que la oí cuando solamente tenía 10 años, y que me sigue encantando. Su título es «Faith».

http://www.youtube.com/watch?v=KZOsv5Ht_s0