Esta mañana veía en mi timeline de Twitter un enlace que me dejaba perplejo: una empresa que se promociona como «centro de formación informática» [sic], anunciaba que emitiría proximamente, para residentes en Madrid y Barcelona, un «carné profesional de community manager». Un rato después de leer el post de la empresa, muchos compañeros se hacían eco de ello en varias redes sociales, y han surgido con fuerza dos hashtags: #carnecm y #carnecmfacts, que han sido durante un rato trending topic en España, haciéndose muy recomendable revisarlos.
Según el texto que figura en el site de «Expertos en redes sociales» (reconozco que ese nombre me da un poco de miedo), el carné «te acreditará como profesional de prensa para cubrir cualquier evento, congreso, feria, y un larguísimo etc que iremos ampliando a medida que el proyecto vaya avanzando. Un credencial o acreditación para esos profesionales que se hacen llamar, EventoMan – EventoWoman, que se dejan la fortuna que ganan trabajando todos los días para cubrir un evento o simplemente reciclarse en un sector que si no estás al segundo, estás out.» Es decir, que los gestores de comunidades, según el texto, son «profesionales de prensa». Ahora me entero.
Más adelante el texto reza así: «Un carnet que unifique la formación existente, el mercado se ha inundado de formadores en la materia, como nosotros muchas escuelas, universidades y centros ofrecen esta formación con el fin de dinamizar sus economías. CEDECO, desde el primer día ha apostado por una formación de calidad, desarrollando modelos de formación basados en la experiencia y la práctica, con menos incapié [sic] en la memorización, basados en modelos de s-Learning o aprendizaje social, como los Griegos, los de antes, no los de ahora. Mediante Agoras2.o donde el conocimiento es un valor añadido, donde el fracaso no está contemplado como algo malo, sino un camino al éxito y la excelencia».
Por otro lado se anuncia la «Asociación de Community Managers, dónde podréis ser parte importante del movimiento que va a acontecer en los próximos años, cuando esto de los Social Media, deje de ser una moda para la inmensa mayoría, y lo puedan ver con las mismas posibilidades que lo vemos los profesionales».
No sigo mencionando el texto original, porque hace bastante daño a la vista: hay numerosos errores en signos de puntuación, faltas de ortografía graves, errores gramaticales y de expresión, y un largo etcétera. Sin duda, se trata de un mal comienzo cuando se habla del community manager, supuesto especialista en marketing y comunicación digital, y más aún cuando la redactora del texto menciona en un comentario del post que es periodista.
Carné de community manager: cubriéndose de gloria.
Pero, aún estando escandalosamente mal redactado el texto, no es el elemento más grave a tratar en el asunto. Lógicamente, los que trabajamos en el sector y observamos cuestiones como estas, no tardamos en buscar los perfiles en medios sociales de la empresa para hacerles llegar nuestra opinión, y esperar su respuesta. No son pocos los posts, las charlas o las ponencias en donde se ha mencionado la importancia de responder adecuadamente a las críticas dentro de una comunidad digital, y de la relevancia de una buena reputación online para una empresa.
He aquí donde nos encontramos con el mayor problema. En primer lugar, la cuenta oficial de Twitter de la futura ACM -Asociación de Communty Managers- usa un lenguaje inapropiado, lleno de palabras en mayúscula, y haciendo un uso exagerado de los signos de admiración, interrogación o puntuación, como se puede ver en estas capturas de pantalla:
El uso indebido y exagerado de estos signos da lugar a un lenguaje que llega a ser agresivo, algo poco propio de una empresa en medios sociales, y todavía más en el caso de que la empresa forme y «acredite» mediante un carné a profesionales del sector de la comunicación y marketing digital. Pero como las cosas pueden empeorar, el último tweet emitido por la empresa hasta el momento ha sido este:
Según la cuenta de @acmanagers, las opiniones que se han vertido durante la mañana son «aberraciones y tonterías». Es decir, que ellos tienen la razón y no se han podido equivocar en nada, independientemente de que muchos de los comentarios que se han hecho a través de los dos hashtags tengan altas dosis de humor e ironía, características bastante habituales del lenguaje tuitero. La empresa no aprovecha ese momento para aclarar la información, sino que rechaza de pleno la opinión de los usuarios, y tal y como dije anteriormente, de una forma agresiva.
Si nos vamos a la fan page de la empresa colaboradora, «Community Managers» (en ocasiones no queda nada claro dónde empieza una empresa y dónde termina la otra, o si son la misma), veremos como la respuesta que dan en el muro ante los comentarios es la misma que en Twitter, ya que han conectado ambas cuentas:
Vemos cómo responden al primer comentario, que les resulta favorecedor, pero dejan sin comentar los siguientes, que tienen un tono bastante crítico. Parece que la empresa sigue haciendo oídos sordos a la reacción de la comunidad, y da la callada por respuesta.
Conclusiones.
El caso presenciado esta misma mañana es un claro ejemplo de cómo no hacer las cosas: en primer lugar, la empresa explica sus intenciones en un post horriblemente redactado, y que como decía @calvoconbarba, ni siquiera tiene una URL amigable. En segundo lugar, usa un lenguaje agresivo e inapropiado en las redes. Y en tercer lugar, no aprovecha el feedback obtenido (claramente negativo en este caso), para explicar mejor su iniciativa, para hacer un post aclaratorio o dar una respuesta eficiente a los usuarios. Queda para otro post mi opinión sobr el carné en sí mismo, aunque quien revise lo que he dicho esta mañana en Twitter y en algún grupo de Facebook, sabe perfectamnete mi opinión.
Al menos, en mi caso, y aún si estuviera de acuerdo con la creación de ese carné, esta empresa o grupo de empresas no me darían ningun tipo de fiabilidad, visto cómo gestionan su propias redes y su reputación online.
¿Qué suele ocurrir en estos casos? Que el tema se convierte en social object y trending topic, y los niveles de cachondeo son altísimos. Y si no queda suficientemente claro, solamente hay que mirar esta imagen del primer «carné» de community manager», obtenido por @Haplo_Shaffer 🙂
Edito: parece que el autor del post no es la misma persona que responde los comentarios. El autor es @el_madu, y la persona que responde los comentarios es una profesora del centro de formación, que se identifica como periodista pero no dice su nombre.
Por otro lado, la empresa de formación ha escrito un post para intentar aclarar el asunto del carné, aunque para mi gusto no aclaran demasiado, y lo único que hacen es dar la oportunidad de que surjan comentarios a la entrada realmente buenos.